Una de las dificultades más comunes entre los magos es el miedo.
Miedo a fallar.
Miedo a hablar delante de gente.
Miedo a que te pillen el truco.
Miedo a que te fastidien el final.
Miedo a los nervios.
Miedo al miedo.
«Hola, mi cuestión es como poder enfrentar un truco de magia delante de las personas y perder tus miedos y tus nervios ante ese acto de realizar magia»
Todos nos hemos dicho alguna vez la frase anterior.
Y yo te lanzo la pregunta: ¿debemos perder nuestros miedos y nervios?
Demósle la vuelta: los miedos no hay que perderlos, tenemos que aprender a utilizarlos a nuestro favor.
El miedo es una de nuestras emociones básicas, ha estado ahí desde que el ser humano es humano.
Si lleva tanto tiempo entre nosotros, ¿por qué deberíamos eliminarla ahora?
De ahí me viene otra pregunta: ¿tiene algo de bueno sentir miedo?
Quizás sí…
- Nos avisa de los peligros que tenemos alrededor (y así poder tomar mejores decisiones).
- Nos impulsa a hacerlo cada vez mejor.
- Nos indica cuando estamos preparados para salir ahí a fuera a hacer magia.
- Nos hace más valientes al enfrentarnos a ese miedo.
- Crecemos, nos hace más fuertes.
El problema surge cuando el miedo deja de ser un recurso y se convierte en un obstáculo para nosotros.
Pero…
«El miedo no deviene en límite incapacitante por naturaleza o por genética»* si no que es nuestro forma de gestionarlo lo que lo convierte en límite.
¿En qué momento todo se tuerce?
Cuando el miedo acecha, solemos hacer una de estas 3 cosas*:
- Evitarlo a toda costa.
- Pedir constantemente protección.
- Intentar controlar y reprimir la ansiedad.
Cuando alguna de estas estrategias nos funciona, todo perfecto, el problema viene cuando dejan de funcionar pero lo seguimos intentando con más fuerza que antes.
Es en ese momento cuando debemos cambiar nuestra forma de “gestionar” el miedo.
Dicho esto, ¿te interesaría que siguiera profundizando sobre este tema?
¿Crees que es interesante que los magos aprendamos a utilizar el miedo y los nervios a nuestro favor?
Comenta abajo y házmelo saber.
Si hay respuesta, en futuros artículos te explicaré trucos para que esta emoción ancestral deje de ser un problema para ti y que tu magia no tenga límites.
Nos vemos.
PD: *del libro “Emociones. Intrucciones de uso” de Giorgio Nardone.
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